SaN AnDrÉs de TeIxIdO...vai de morto o que non foi de vivo!!!


Galicia es terra meiga y estos dias celebramos o Samaín, aunque en la mayoría del resto del territorio español se conoce como Hallowen, aunque la cosa es bastante diferente. Calabazas con caras, velas e "contos de mortos". San Andrés de Teixido está lleno de leyendas que hace que sea un lugar misterioso y mágico. Se dice que allí se encuentra la puerta al mas allá del mundo celta y que quien no lo visita de vivo lo hará después, de muerto. 


Esta aldea está en el concello de Cedeira, en la sierra de A Capelada, muy cerca de los acantilados sobre el mar.

Una vez allí, para que se cumplan los deseos pedidos al santo hay que beber en la fuente. Tiene 3 caños y hay que hacerlo por cada uno de ellos y para que se esté seguro de que son cumplidos los deseos, hay que tirar un trozo de pan en el agua de la fuente. Si flota se cumplen, si se hunde hay que volverlo a intentar en la siguiente visita.

Al rededor de la capilla suele haber vendedores de unas figuritas de pan llamadas sanandreses. Son figuras hechas con miga de pan y la tradición cuenta que la persona que los tenga consigo estará protegido. Cada figura está relacionado con algún tema. La mano para el amor y las buenas compañias; el pez para el trabajo; la barca para viajes, casa y negocios;  el santo para la salud y por ultimo el pensamiento para los estudios.


Otro elemento mágico es la "herba de namorar". Es un remedio infalible para el mal de amores. Se dice  que hay que hacerse con ella en la Noche de San Juan, noche meiga donde las haya. Hay que hacerla llegar de algún modo a la persona que se pretende conquistar, y se recomienda meterla en su bolsillo, sin que se de cuenta. También se llama "herba empreñadeira", al parecer es buena para la fecundidad de las mujeres. Esta hierba crece en los acantilados.

Los acantilados de San Andrés son los más altos de la Europa continental, con más de 600 metros sobre el mar. Uno se los sitios desde donde se pueden disfrutar de las vistas increibles es desde la Garita de Herveira.




Punta Candieira y Punta Robaliceira son dos de los puntos que desde allí se ven. Pero impone la infinidad del mar o mares, porque a poca distancia se encuentra Cabo Ortegal donde se junta el Cantábrico y el Atlántico

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